Pago mucho por mi hipoteca, es barata
Cuando buscamos contratar un crédito hipotecario queremos que sea una hipoteca más barata. Y siempre se nos pasa por la cabeza si realmente hemos contratado el mejor préstamo hipotecario, las mejores condiciones, la mejor entidad bancaria.
Esto es muy relativo ya que una misma entidad puede conceder diferentes tipos de préstamos dependiendo del perfil económico de cada cliente, su situación laboral, el nivel de ahorros, garantías aportadas, etc. Las hipotecas más baratas no tienen comisiones de apertura, de estudio, ni de desistimiento, ya sea total o parcial.
Generalmente una de las cosas que suele encarecer las hipotecas es la contratación de seguros adicionales o planes de pensiones; sí que hay algunos que son obligatorios por Ley, como el de incendio, pero otros son innecesarios y lo único que hacen es incrementar la cuota mensual.
En algunas ocasiones las garantías adicionales, ya sean aportar avalistas o hipotecar otro bien inmueble, pueden ser un coste más, aunque a primera vista la hipoteca pueda parecer más barata. Dependiendo de las circunstancias puede ser preferible contratar otra con un tipo de interés mayor.
El tipo de interés aplicado también es otro de los puntos que puede conseguir que una hipoteca sea más económica. Actualmente, a corto plazo tiende a ser más económico el interés variable, ya que el Euríbor tiene un valor bajo y se puede llegar hasta a 40 años de plazo de vencimiento, no afectando al diferencial.
Aunque si lo que se prefiere es tener una mayor tranquilidad, es preferible, dependiendo de la situación laboral y económica del cliente, contratar un interés fijo; ya que de esta manera se mantendrá durante toda la vida del préstamo la misma cuota, el plazo de una hipoteca de este tipo será de 25 a 30 años, siendo mayor el tipo de interés a un mayor plazo.